Aumenta la presión conservadora: Investigación de juicio político contra Joe Biden en marcha

El presidente de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Kevin McCarthy, ha ordenado la apertura de una investigación de juicio político contra el mandatario demócrata Joe Biden. Aunque las posibilidades de que esta investigación prospere son inciertas, refleja un creciente aumento de la presión por parte de la bancada conservadora contra el presidente.

Los conservadores acusan a Joe Biden de intervenir en los negocios en el extranjero de su hijo Hunter, aprovechando sus conexiones políticas, y de beneficiarse de estas transacciones. Además, sostienen que la Administración demócrata ha otorgado un trato de favor a la familia Biden debido a su estatus político.

A pesar de meses de pesquisas preliminares sin pruebas concluyentes, la apertura de esta investigación les proporciona una plataforma para solicitar registros bancarios y otros documentos en un esfuerzo por encontrar evidencias de corrupción o irregularidades financieras.

Kevin McCarthy ha designado al presidente del Comité de Vigilancia de la Cámara de Representantes, James Comer, para liderar las indagaciones, en colaboración con los presidentes del Comité Judicial, Jim Jordan, y del Comité de Medios y Arbitrios, Jason Smith, todos ellos miembros del Partido Republicano.

Inicialmente, McCarthy había considerado someter la apertura de la investigación a votación en el pleno de la Cámara, pero las reticencias de algunos conservadores moderados lo llevaron a tomar la decisión de manera unilateral, bajo la presión del ala más radical de su partido.

El proceso de juicio político en Estados Unidos comienza en la Cámara de Representantes, donde se vota si se presentarán cargos contra el presidente en ejercicio. Si la resolución de destitución es aprobada por una mayoría simple de los miembros de la Cámara Baja, el caso se traslada al Senado, donde las resoluciones relacionadas deben contar con el respaldo de dos tercios de los senadores presentes. Es importante señalar que el Senado también tiene la autoridad para descalificar a la persona sometida a juicio, impidiendo que vuelva a ocupar un cargo federal en el futuro.

A pesar de que los republicanos obtuvieron el control de la Cámara de Representantes en las elecciones de medio mandato del año pasado, con 222 de los 435 escaños, en el Senado, los demócratas mantienen 48 escaños, mientras que los republicanos tienen 49. Sin embargo, tres senadores independientes tienden hacia posturas progresistas, lo que hace que la destitución de Biden sea un escenario poco probable.

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